Centro Universitario de Tecnología y Arte Digital

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Adrián Pueyo: “El Libro de la Selva es el segundo proyecto en el que trabajo y que nominan al Óscar»(y lo gana)

Hace unos días hablábamos con nuestro antiguo alumno del Máster Profesional en Iluminación 3D y VFX, el madrileño Adrián Pueyo, sobre sus más recientes trabajos. Entre ellos, ‘El libro de la selva’, donde ha trabajado como VFX Compositor en el departamento de Efectos Especiales, nominado al Óscar. Pueyo se preguntaba a sí mismo: ‘¿mi departamento ganará?’. Y se respondía: ‘Sí’. ‘¿Cuál es tu argumento?’: ‘Busca lo más vital, no más, lo que es necesidad, no más…’.

Y, sí, el departamento de Visual Effects de ‘El libro de la Selva’ acaba de ganar el Óscar. Se nos hincha el pecho al ver que nuestros talentos llegan tan lejos… ¡Enhorabuena, Adrián! No es la primera vez que Pueyo participa en una producción premiada en este certamen, también lo hizo en ‘The Martian’. Y lo reconoce: “me llena de orgullo y satisfacción. Es el segundo proyecto en dos años en el que trabajo y que nominan al Óscar a Mejores Efectos. ¡No tengo palabras!”, dice a U-tad.

Con motivo de la nominación y reciente premio hemos querido hablar con Adrián sobre el trabajo que ha realizado, sobre todas las experiencias que ha vivido desde que salió de U-tad y sobre la motivación que le ha llevado hasta este punto de su vida.

¿Cuáles son tus motivaciones desde que eras un niño?

Soy muy friki en algunas cosas y un ignorante en las demás. Creo que eso es lo que me define, que todo lo que no me sirve para algo no me suele interesar. Supongo que tiene una parte mala bastante evidente, pero me libera un 99,9% del cerebro y del tiempo para dedicarlo a las pocas cosas que de verdad me gustan.

Mis pasiones siempre se han relacionado con los números, el arte, el movimiento, el ritmo, los contrastes y, en general, “crear cosas”. También con hacer lo que no hacen los demás y llevar la contraria, pero supongo que eso ha sido más una motivación subyacente.

Después de una eternidad insistiendo, con nueve años conseguí que me comprasen una cámara de vídeo y, con once, me aburrí de jugar a la Playstation 2 y la cambié por el Photoshop CS. Esos años descubrí esa serie de aficiones de persona rara que me motivaban lo suficiente (y nadie de mi entorno hacía) para completar el arsenal: la fotografía, el parkour, la batería, el desarrollo web o el diseño digital.

¿Siempre quisiste dedicarte a lo que se ha convertido en tu forma de vida?

Mis sueños de infancia se fueron moldeando hacia una incertidumbre porque la sociedad prácticamente me hizo desvincular las cosas que me divertían con lo que podía hacer para ganarme la vida “en condiciones”. Así que seguí con todos mis hobbies absurdos, y un buen día entré a una ingeniería industrial, siempre muy cerca de dejarlo todo y dedicarme lo que me gustaba, que ya me daba dinero, pero nada me suponía por sí solo una motivación suficiente.

Fue por eso que, terminando mi segundo año de carrera, descubrí que al lado de mi casa impartían un máster en VFX (tuve que buscar en Wikipedia qué era). De golpe todas las piezas de mi cerebro se juntaron y sentí la necesidad absoluta de tirarme a la piscina. Por lo que leí que formaba el temario, juntaba todas y cada una de mis pasiones: la fotografía y las matemáticas, el vídeo y los efectos, el arte y el ritmo.

Dos apuntes graciosos: el primero, es que empecé el máster sin la más mínima idea de “si había trabajo de eso”, mi única motivación era aprenderlo y luego ya, si eso, terminar la ingeniería. Y segundo, nunca en mi vida había oído hablar del término ‘composición digital’, que es a lo que me dedico actualmente, y que es en concreto la parte que mejor combina mis habilidades y pasiones. ¡Fue todo un descubrimiento!

¿Con qué producción, de todas las que has trabajado, te quedas?

En España he trabajado en ‘Mortadelo y Filemón’, ‘Extinction’, ‘Ma Ma’, ‘El Desconocido’, ‘Cien Años de Perdón’, ‘Tini’ y ‘Un Monstruo Viene a Verme’.En Londres he trabajado en ‘The Martian’, ‘El Libro de la Selva’, ‘Passengers’ y ‘Piratas del Caribe 5’.En Vancouver he estado con ‘Wonder Woman’, y ahora mismo estoy trabajando en el remake de ‘La Momia’.

Me quedo con todas y cada una de ellas, pues no hay un proyecto en el que no haya aprendido cosas súper interesantes (o cosas que no volver a hacer, que es aún mejor), o conocido a gente con muchísimo talento. Como estamos en la cultura del “elige uno”, me quedo con ‘El Libro de la Selva’, porque es donde más aprendí y, además, la película que más me ha gustado ver.

Próximamente trabajarás en ILM, ¿Qué vas a hacer allí?¿Cómo surgió la oportunidad?

Seguramente trabaje en la nueva parte de ‘Transformers’ aunque, en este sector y con las empresas grandes, nunca se sabe porque están con bastantes proyectos a la vez y en el último momento te ponen donde más te necesiten.

La oportunidad me ha surgido al modo tradicional: enviándoles mi reel y CV en la web (por eso veo tan importante tener una buena imagen online y la reel lo más actualizada posible). Ha ayudado también estar ya viviendo en Vancouver, pues facilita mucho los trámites para la entrevista en persona, los vuelos o el visado.

¿Cuáles son tus referentes profesionales y cómo te inspiras en ellos?

Mis principales referentes son cada uno de los compañeros y supervisores que he tenido. Este trabajo es bastante sacrificado en cuanto a esfuerzo y dedicación. Casi todos los que me rodean lo hacen porque comparten mi pasión, y eso hace que sea muy fácil contagiarte de talento y formas de pensar alternativas, que es lo que va abriéndote el abanico de recursos con los que cada día hacer las cosas mejor.

¿Cómo ha cambiado tu vida desde que saliste de U-tad?

Mi hobby es mi trabajo ahora, creo que eso es bastante por sí solo. Además lo hago mejor, y por fin tengo metas muy concretas que ir alcanzando.

Dentro de U-tad, salir con una reel encaminada y poder acceder a prácticas nos dio un empujón increíble a todos los alumnos de la clase. Fuera de ella, cada vez que alguien ha confiado en mí para dar un paso adelante (haciendo algo para lo que no estaba preparado) y no he defraudado, me ha supuesto un pequeño trampolín. Por eso estoy muy agradecido a los que me dieron estas primeras oportunidades, las dos más grandes fueron en Telson y cuando me contrataron desde MPC Londres.

¿Cuál ha sido tu mayor obstáculo?

Adaptarme al ritmo de los demás, o a “lo que se espera de mí”. Soy demasiado impaciente en ese aspecto y basta que me pongan obstáculos para que intente pasarlos cuando muchas veces habría sido mejor estar tranquilo e “ir al ritmo que toca”. También aprecio la parte buena y lo veo una parte positiva del progreso.

¿Cuáles son tus aspiraciones de futuro?¿Qué te gustaría conseguir que aún no has logrado?

No dejar de aprender todo lo posible y ayudar a otros a saber más y descubrir la belleza de mi trabajo. Encontrar formas nuevas de hacer cosas, y cosas nuevas que hacer con las formas ya conocidas. Me gustaría liderar y, cuando esté preparado, supervisar. Pero que nada me impida seguir aprendiendo.

¿Cambiarías algo, a nivel profesional y personal, de lo que haces actualmente?

A nivel personal cambiaría el fish and chips por un buen bocata de jamón. Estoy disfrutando mucho estos años de ver países nuevos y las mejores empresas, pero me gustaría terminar en España. Confío en que estos años cada vez habrá mejores proyectos y empresas de VFX y animación y, con suerte, cuando sea mi momento de volver y asentarme un poco habrá un sector como el de hoy o todavía mejor, esperando.

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